La banda sueca dio el lunes pasado su cuarto concierto en la Ciudad de México, tres conciertos que han ido sufriendo una constante transformación, síntoma inequívoco de la incesante evolución de la banda en estilo, integrantes y fanáticos.
Cuatros años pasaron desde la última vez que In Flames pisó un escenario en la Ciudad de México y en este 2013 su visita formó parte de su gira norteamericana, misma que también tuvo un día reservado para el Hell And Heaven Fest de Guadalajara, Jalisco.
Pese a ser lunes el recinto tuvo una buena entrada, la parte escalonada del Circo se encontraba prácticamente llena y las butacas a un tercio de su capacidad. Los suecos con puntualidad inglesa hicieron que las luces del circo se apagaran exactamente a las 8:30 de la noche y entonces el ambiente comenzó a desenvolverse poco a poco en lo que sería una noche rotunda.
La banda inició con “Sounds Of A Playground Fading” canción de su más reciente álbum, la puntualidad fue tanta que en ese momento aún me encontraba en el lobby comprando mis cervezas, desde ahí escuché el estruendo con el que el público mexicano recibió a la banda, muchos en la fila corrieron desesperados hacia el escenario mientras otros alcohólicos como yo permanecimos estoicos en la fila, esperando por nuestras cervezas, cuando por fin llegué al escenario la canción ya se encontraba en sus momentos finales, me acomodé y lo primero que noté fue a los fanáticos cantando en coro la letra de la canción como si se tratara de un clásico de años, evidentemente SOAPF tuvo un gran impacto entre las nuevas generaciones de fanáticos cosa que quedó bastante clara esta noche, siguiendo la tónica de frescura continuaron con “Where The Dead Ships Dwell”, una de las canciones más populares del nuevo álbum, recibida incluso de mejor manera que la primera y cantada en coro de forma aún más contundente, después de este par de canciones el mensaje de In Flames era claro, sería un concierto lleno de frescura, energía y emociones.
El escenario fue sencillo, una manta dejaba ver la portada del SOAPF y eso era todo, el resto de los visuales tuvieron que ser cubiertos por Björn Gelotte, Niclas Engelin, Peter Iwers, Daniel Svensson y Anders Fridén moviéndose y elevándose sobre el escenario.
Sin concesiones ligaron tres canciones más, sólidas y potentes, primero “Pinball Map” que resultó igualmente exitosa que las anteriores, especialmente durante su estribillo, ésta canción me colocó ya en un estado de euforia importante y provocó veloces azotes de mata durante sus partes más rápidas, luego “Trigger” dejó caer esa sensación de maquinaría pesada y engrasada dentro del Circo Volador y la tercera pieza de esta trifecta fue “Embody The Invisible” la cual desde la primeras notas me llevó de regreso a través de los años a épocas hoy nostálgicas.
Fue un poco raro ver a Anders sin azotar sus características dreadlocks, sin embargo sus dotes de frontman parecen haber alcanzado un nivel de madurez definitivo, con completo dominio hablaba constantemente con el público y al mismo tiempo lo invitaba a hacer mosh pit y crowdsurfing.
Después de estas tres canciones la banda se echó por completo el concierto a la bolsa, la introducción de la siguiente canción se dejó escuchar tan solo durante unos segundos, entonces se detuvo como si todo el sistema de audio hubiera perdido energía y Anders amenazó, “La siguiente canción NO se llama Cloud Connected”, pero la introducción se reanudó y en seguida los riffts abrieron de par en par las puertas de ese cielo de In Flames conocido como “Cloud Connected”, grandiosa, sin falla y con un público entregado al coro, simplemente perfecta!, después continuaron con “The Hive” del disco Whoracle, “—Nos vamos a regresar 16 años en el tiempo con esta canción” mencionó Anders “—Cuando muchos de ustedes seguramente estaban en pañales” y a diferencia de lo que yo hubiera esperado la verdad es que fue una de las canciones más tímidamente recibidas. Después de “The Hive” Anders habló de lo bueno que era ver al público mexicano y nos invito a ir a verlos más seguido en Suecia, cosa que desató toda una serie de bromas y comentarios en el público, después y más emocionado mencionó que la canción que tocarían a continuación normalmente no se encontraba dentro de sus últimos shows pero que el hecho de estar en México era suficiente motivo para que de cualquier forma la tocaran, entonces inició ONLY FOR THE WEAK. No necesito contarles más.
El sonido del Circo estuvo mayormente a la altura, con algunos ligeros problemas al principio (como es costumbre) y también algunos detalles en la voz pero en general y hacia el final del concierto un audio muy a la altura.
Regresaron a vientos muchísimo más frescos con “Ropes” y “Fear Is The Weakness”, Anders volvió con el público y habló de quería ver en ellos la actitud que debe tenerse en un show de heavy metal ya que a eso habían venido, explicó señalando al personal de seguridad frente a la valla frontal, que ellos se encontraban ahí para ayudarnos y recibirnos al momento de caer, nos invitó a navegar sobre el público con toda confianza sin dejar de mencionar que tuviéramos cuidado.
Con animados aplausos durante su introducción fue recibida “The Quiet Place” la cual volvió a hacer a la gente saltar. Intensa y potente fue otra canción cantada a coro prácticamente en su totalidad. Me sorprendió mucho ver esta base de fanáticos, distinta a la que se observó hace cuatro años, ahora completamente inmersa en la banda, no se trataba de fanáticos casuales, eran fans por completo acérrimos de In Flames los que se podían observar. Calmaron un poco las llamas con “Ropes” del nuevo disco, pero rápidamente volvieron con “The Mirror’s Truth”… “It’s best to go, while I collapse, It’s not a false alarm, The ashes settle in!”…
Y entonces funcionó, después de una segunda invitación por parte de Anders el público comenzó a realizar Croudsurfing y por primera vez en el Circo Volador la gente no tiraba puñetazos a los que iban pasando por arriba (motivo por el cual el croudsurfing no es una práctica muy común en el Circo Volador) y entonces fueron muchos los que se animaron, “—De eso era de lo que estaba hablando” concluyó Anders.
Without even trying
Let this light explode
Without even trying
Find the exit sign…
then disappear!
Siguieron con “System” y luego “Deliver Us” que fue la sexta canción del SOAPF incluida en este setlist, todo un lujo que solo te puedes dar si tu álbum en turno tiene la suficiente calidad para lograrlo, cosa que al SOAPF le sobra.
El concierto estaba entrando en una etapa de madurez y en estos momentos en los que la euforia de la gente se encontraba al tope el grito de “México-México, México-México!” no pudo contenerse más, un coro o porra un poco inapropiada si me lo preguntan pero la gente estaba así de emocionada y eso fue lo que gritó, “—Esperen esperen, nosotros somos quienes decimos esa parte y ustedes gritan ‘In Flames-In Flames’” mencionó Anders e instantáneamente el grito del público cambio a “In Flames” y Anders tal como lo dijo complementó con gritos de “México-México”, hubo entonces aplausos entre ambas partes.
El final fue sellado con otra trifecta de gloria, primero “Alias”, emotiva canción del penúltimo disco “A Sense Of Porpuse” con grandes pasajes de guitarra acústica (en este caso grabada) y con un estribillo sencillamente épico y coreado en su totalidad, luego “Take This Life” y su pesadez exprimió esa última reserva de energías, los últimos pero firmes y contundentes azotes fueron dados por el público durante las partes más pesadas y rápidas de “Take This Life” y por supuesto el último mosh pit de la noche ocurrió en el área más intensa del circo, área a la cual Anders se dirigió y excluyó de la invitación que hacía al público en general a comportarse como una audiencia de Heavy Metal “—Ok, ustedes no, ustedes están muy locos ya” sentenció en su momento. Intensa de inicio a fin se consumió así la penúltima canción del show.
Y después el final perfecto llegó a cargo de las notas de “My Sweet Shadow”, no hay ya un final mejor en un concierto de In Flames que esta canción, tiene ese gran toque de realización y de créditos finales después de una épica película con final feliz, este debe ser sin duda el final oficial de todos y cada uno de los conciertos de In Flames. Y con esta canción la gente gritó y cantó a coro por última vez.
Setlist:
Sounds of a Playground Fading
Where the Dead Ships Dwell
Pinball Map
Trigger
Embody the Invisible
Cloud Connected
The Hive
Only for the Weak
Ropes
Fear Is the Weakness
The Quiet Place
All for Me
The Mirror’s Truth
System
Deliver Us
Alias
Take This Life
My Sweet Shadow
Revisando el setlist se observa la frescura de la mayoría de las canciones y no queda más que concluir y notar que la calidad de discos que ha lanzado In Flames en los últimos años sencillamente no decae, no por ahora, sus discos siguen siendo sólidos y repletos de buenas canciones, cosa que se traduce en mejores actuaciones en vivo y cada vez más fanáticos de este lado del mundo.
Una noche épica e inolvidable como pocas, In Flames para mí es una de las mejores bandas con las que puedo reaccionar en vivo, mis recuerdos están enlazados a las notas de la música de esta banda y en especial con sus conciertos, después de dicha demostración, la gente no quería salir nunca del circo, nadie se movía, pero el concierto no tenía por qué durar más, la droga ya había sido entregada e inyectada en dosis perfecta y la reacción en las caras de los que finalmente comenzaron a dejar el inmueble vacío fue de completa satisfacción.
En conclusión fue una grandiosa, inolvidable e inmerecida noche para un simple mortal como yo, absolutamente hermosa. IN FLAMES FOREVER.