“Unleashed in the East” es el álbum en vivo que Judas Priest lanzó en 1979, y si alguna vez has querido escuchar cómo suena un terremoto metálico en Japón, esto es lo más parecido que pudieras encontrar. Fue grabado durante sus conciertos en el “Koseinenkin Hall” y “Nakano Sunplaza Hall” de Tokio, Japón el 10 y 15 de febrero de 1979 respectivamente; captura a la banda británica en un grandísimo momento de su carrera, cuando estaban conquistando al mundo con cuero, cadenas, potencia y riffs que podrían partir planetas en cachitos. ¡Quién diría que el heavy metal también puede saber a pescado crudo!

El álbum es una especie de “lo mejor de Judas Priest, primera temporada”, con canciones como “Exciter” y “Victim of Changes” que te dejan claro que Rob Halford no es humano, porque ¿cómo alguien podría cantar así? Su rango vocal en este disco debería venir con una advertencia para los oídos sensibles. Y ni hablar de las guitarras de K.K. Downing y Glenn Tipton, que suenan como si dos robots samuráis estuvieran luchando en el escenario. Es metal en estado puro y sin anestesia.

Ahora, hay que hablar de la pequeña controversia que rodea a este álbum. Al parecer, no todo lo que brilla es oro, y algunas voces sugieren que “Unleashed in the East” fue retocado en el estudio, con algunos arreglitos aquí y allá para que sonara más brutal. Pero la realidad es que hasta las grandes estrellas de rock necesitan un poco de retoque visual e incluso de audio, ¿por qué tendríamos que juzgar un intento de sonar bien? ¡El resultado es muy bueno de cualquier manera! Si la edición del álbum fue como cubrir de chocolate el pastel, al final solo lo hizo más sabroso.

Este disco impulsó importantemente la carrera de la banda, especialmente en Estados Unidos, donde comenzaron a ganarse un ejército de fans que, probablemente, todavía estén sacudiendo la cabeza al ritmo de sus canciones. “Unleashed in the East” fue el precursor perfecto para lo que vendría después, el legendario “British Steel” (1980), que fue el uno de los álbumes que dio los últimos toques al heavy metal como lo conocemos hoy.

En definitiva, si quieres saber cómo es estar en un concierto de Judas Priest sin tener que viajar a 1979, este es el LP que necesitas escuchar. “Unleashed in the East” es energía pura, técnica impecable, un poco de edición en estudio y un montón de cuero y metal. ¿Qué más podría uno pedir?