“Non Serviam” se produjo usando el sello característico del black metal al estilo griego que las bandas de ese hermoso país regalaron al mundo a finales de la década de 1980 y principios de la década de 1990. Es el segundo álbum de la banda, lanzado el 10 de octubre de 1994, y para varios es su obra definitiva dentro del ámbito del black metal helénico. Quizás sea un poco exagerado, pero lo que es cierto es que por lo menos “Non Serviam” sí es una pieza clave dentro del repertorio discográfico de Rotting Christ, porque muestra un refinamiento en el sonido logrado en el monumental y aclamadísimo álbum Thy Mighty Contract, y porque su legado ha permanecido a lo largo de los años en el gusto de los fanáticos. Cualquiera que los conozca y se le pregunte por un álbum o canción de estos griegos mencionaría sin dudar a “Non Serviam”.
Dejando un poco de lado el impacto histórico, y adentrándonos en lo musical, podríamos decir que aunque el sonido del álbum comparte raíces con las bandas de la escena nórdica (Noruega y Suecia principalmente), el enfoque griego es introspectivo y melódico, con una atmósfera oscura y mágica. Este álbum destaca por sus riffs hipnóticos y melódicos, que se entrelazan de manera intrincada, creando paisajes sonoros llenos de capas y matices.
A pesar del uso de una caja de ritmos, que añade un carácter mecánico, las guitarras, lideradas por Sakis Tolis, llenan el espacio con una poderosa emotividad. Los teclados de Magus Wampyr Daoloth refuerzan la atmósfera sin sobrecargarla, proporcionando una profundidad envolvente. Otro punto importante a analizar es la voz de Sakis Tolis; aunque tiene una imperfecta pronunciación del inglés, termina añadiendo gracias a ello cualidades casi enigmáticas al álbum, reforzando así su originalidad. Cada canción se siente como parte de un todo cohesivo, creando una experiencia inmersiva para el oyente.
El álbum destaca por su capacidad para crear una atmósfera evocadora y oscura con recursos limitados: guitarras entrelazadas, teclados sutiles y una percusión rígida programada. Los riffs, simples pero efectivos, son inconfundibles y mantienen una identidad propia, explorando terrenos tanto melancólicos como triunfantes.
Non Serviam no es solo una colección de canciones, sino un viaje cohesivo que atrapa y envuelve al oyente, destacando como un gran logro del black metal griego. En definitiva, Non Serviam sigue siendo un hito en la escena, una obra que transporta al oyente a un reino antiguo y lleno de magia. Recomendamos ampliamente que escuches todo el álbum completo y damos una calificación de 9/10.
Canciones que destacan:
- The Fifth Illusion.
- Non Serviam.
- Where Mortals Have No Pride.
- Mephesis of Black Crystal.
